Muy probablemente tengas en casa un gran cúmulo de obras de arte que crece a diario con lo que tus hijos traen de la escuela, cursos de verano (pascua, etc…), actividades extra curriculares, restaurantes (¡las he rescatado hasta de los manteles!), talleres diversos o que hacen juntos en casa. No sé tú, pero yo no soy fan de acumular cosas, aunque sí soy fan de las creaciones de mis artistas favoritas y de la idea de conservar tantos recuerdos como sea posible. Por eso he encontrado 5 formas de organizar, exhibir y conservar este legado sin que se deteriore y sin guardar montañas de papeles y materiales diversos.
Lo primerito que tienes que hacer es seleccionar. Aunque quieras, es humanamente imposible conservarlas tooodas así que escoge —o mejor aún— escojan junt@s sus obras favoritas a inmortalizar y con ellas:
1. Haz un mural (galería de arte o wall art).
Rinde homenaje a sus mejores creaciones colgándolas en una pared dedicada a ese propósito. De esta forma quedan expuestas para ser admiradas, comentadas y explicadas por los propios artistas a los observadores. Esto hará que tus hijos se sientan aún más orgullosos de haberlas creado. Te recomiendo rotar periódicamente las obras para que no se vuelvan parte del paisaje y para dar cabida a las novedades que constantemente van llegando.
En casa montamos el mural de las obras bidimensionales colgando 2 tiras metálicas —una para cada niña— identificándolas con su inicial y sujetamos los dibujos con imanes. Tenemos a parte un par de repisas donde exponemos también las obras tridimensionales (y fotos).
Date una vuelta por mi Pinterest. En mi tablero CASA {galería de arte} encontrarás muchas otras ideas para inspirarte a montar tu propia galería.
2. Crea un un fotolibro, un fotomosaico o un álbum digital.
Fotografiar cada pieza de arte es una solución muy conveniente que te permite ahorrar espacio físico en casa (que no virtual) y te da flexibilidad de poderlas exhibir de diversas maneras cómo veremos más adelante (ver puntos 4 y 5). La clave es tomar fotografías de buena calidad, lo que implica una buena iluminación, un fondo blanco liso perfecto y una cámara con buena resolución.
Para ello te recomiendo que:
- Encuentres en tu casa un lugar iluminado por abundante luz natural proveniente de ventanas y/o puertas. Necesitas esa luz suave y difusa que ilumina toda la habitación, no luz directa.
- Pongas las obras sobre un fondo blanco mate liso justo en ese lugar. Yo utilizo la mesita de las niñas o sus escritorios, pero también puedes usar papel ilustración, opalina o tu cama con una sábana cajonera blanca bien estirada.
- Te coloques justo encima de la obra con la cámara apuntado directamente hacia abajo sin bloquear la luz. No juegues con la perspectiva. Considera poner las obras en el suelo o pararte sobre un banquito para conseguir un plano cenital.
- Utilices preferentemente una cámara DSLR. Si vas a capturar para la posteridad, necesitas la mejor calidad.
- Configures los parámetros de forma que requieras nula o muy poca edición. Estando en una habitación con buena luz natural, deberías poder tomar tus fotos con el balance de blancos automático o luz natural. Haz tomas de prueba hasta que logres que tu fondo se vea lo más naturalmente blanco posible.
- No uses flash. La clave para obtener un fondo perfectamente blanco es sobreexponer ligeramente la foto.
- Viste una playera blanca o gris claro. ¡La luz se refleja en todo, hasta tus prendas! y esto afecta tu fondo perfectamente blanco.
- Si utilizas un smart phone, toques en la pantalla sobre el sujeto para enfocar correctamente, de lo contrario tendrás una imagen borrosa aunque la veas bien en la pantalla. Si usas iPhone, después de enfocar al sujeto, aumenta ligeramente la exposición deslizando tu dedo por la pantalla cuando aparezca el ícono del sol.
Una alternativa a fotografiar es escanear en alta resolución, aunque esto sólo te servirá para dibujos planos, ya que cualquier relieve hará que la hoja no tenga contacto por completo con el escáner y pierdas calidad de imagen. La mejor alternativa en estos casos, es sin duda la fotografía porque podrás captar cualquier obra volumétrica o no, de cualquier tamaño e incluso, texturas.
Para tus archivos digitales te recomiendo manejar una nomenclatura estandarizada usando nombre de tu hij@ seguido por la fecha de creación en formato aaaammdd y el título de la obra. Ej. «JULIA 20191118 Animales.pdf» De esta manera, aunque también lleves una organización por carpetas, podrás identificar el archivo fácilmente cuando lo encuentres aisladamente en tu computadora. Para esto te recomiendo que tan pronto traiga a casa sus creaciones, les pongas con lápiz estos datos para no abusar de tu buena memoria.
Una opción para llevar tus álbumes digitales es el App gratuita llamada Artkive. Esta App te permite capturar, organizar y guardar las obras de arte llevando un registro cronológico por hijo, con la posibilidad de agregrar notas y poderlo compartir con familiares y amigos directamente en la aplicación o a través de mail o Facebook. Este es realmente el único feature que podemos aprovechar estando aquí en México, pero si estás en Estados Unidos, puedes también contratar su servicio de Artkive Box que consiste en que te mandan una caja donde guardas y les envías las obras para que ellos hagan el trabajo de digitalización por tí.
Podrías mandar hacer un fotolibro. Te recomiendo MyArtBook con quien yo mandé hacer unos libros personalizados para mis hijas con un recuento de las actividades más significativas que hicimos en 2020 durante nuestro confinamiento creativo. Fueron mi regalo de Navidad para ellas ese año y la verdad es que me encantaron. Puedes optar por enviarles por correo tradicional todas las obras etiquetas y ellos se encargan de digitalizarlas, diseñar e imprimir o —como yo— compartirles los archivos ya digitalizados.
También puedes crear mosaicos fotográficos personalizados y para esto CuadrosMX es una excelente opción. Con ellos puedes crear un set de cuadros decorativos de 4, 8, 16 o 32 piezas con fotos tomadas directamente de tu celular. Cada mosaico mide 24 x 24cm, están diseñados con su sistema de soporte para que los puedas colocar en tu espacio y trae la plantilla con la que es ¡súper fácil colgarlos! Puedes escoger entre 3 tipos de acabados: PVC, aluminio cepillado y acrílico. Yo me fui por este último y nos encantó el resultado.
3. Monta una exposición temporal.
Este es un espacio adicional al de la galería de arte sugerida en el punto 1, creado —como su nombre lo indica— por tiempo limitado. A nosotros nos pasa que Julia de repente crea toda una serie de obras pertenecientes a una misma colección. En estos casos, considero una buena idea exhibir la colección completa temporalmente. La galería es más bien una selección un tanto aleatoria de obras diversas.
Para estas exhibiciones uso casi siempre la maravillosa Patafix de UHU tratándose de obras bidimensionales, o las repisas existentes, tratándose de obras tridimensionales.

4. Enmarca y cuelga los que más te gusten.
Doodlespot me parece una súper opción, pero sumamente cara (a menos que vivas en España, Estados Unidos, Dinamarca… y aún así). Como me encanta la propuesta y los estilos gráficos, decidí hacer mi propia versión.
Si les late esta propuesta, yo se las puedo hacer.
5. Dales vida.
Puedes mandar a hacer peluches o muñecos basados en los dibujos de tus hij@s, como por ejemplo, los amigurumis (muñequitos tejidos a gancho). Así fue como cobraron viva Lilo y Monono, geniales ¿no? Julia los dibujó y se los regalamos de su cumpleaños #6.
Desde hace varios años, Ikea ha lanzado concursos para que los niños alrededor del mundo manden sus dibujos con la posibilidad de ser seleccionados para producir una edición limitada de peluches para su línea de juguetes SAGOSKATT. Estos fueron los ganadores de la edición 2018. ¿Geniales no? A mí me encantaría ver en tienda algún peluche creado por mis hijas…
¿O qué les parecería que del Día de las Madres les regalaran una muñeca inspirada en un dibujo de ustedes hecho por su hij@?
También puedes imprimirlos en una playera o taza. A mí me regalaron este del día de las madres y me hicieron feliz. La familia dibujada por Julia (Abril 2020).
Debo confesar que como quiera tengo también guardadita una selección de mis obras favoritas dentro del baúl de los recuerdos, porque nada se compara con la emoción de (re)encontrarse con un original algunos años después, como estos que datan de 1985-1986 y que subsisten gracias a mi mamá. (Queda claro que el talento artístico de Julia no lo heredó de mí…)
¿Tú qué haces con las obras de tus hijos?